Aparentemente el requisito indispensable para hilvanar un párrafo decente es la falta de sueño. Basta posar la cabeza en la almohada para ser asaltado por ideas inconclusas, por palabras que no encontraron el valor de hablar en voz alta durante el horario de oficina. Atrás quedaron los miedos a la oscuridad, a duendes cabrones con vocación de carnicero y a la muerte súbita. Ahora en la oscuridad vive el miedo a la irrelevancia, a no tener las credenciales que tu boca predica, al escrutinio de tus congéneres, a listas de cosas por hacer versus cosas hechas. Y es en los minutos de la desnudez existencial del tratar de dormir cuando te das cuenta de que la lista crece diariamente y que estas haciendo poco, o nada, para contener el tsunami de mierda que se avecina. El resultado inevitable de esa inundación es, invariablemente, una noche en vela. Y la vigilia sólo sirve para tres cosas: buscar el amor bajo unas sábanas, hacer trabajo atrasado o escribir.
Hoy me decanto, en contra de mi voluntad, por la tercera, tratando de responderme una de las constantes preguntas que secuestran mis horas.
¿Por qué carajo abrí este blog?
Y la segunda pregunta, necesaria y derivada de la anterior.
¿Es acaso este espacio de letras ocasionales una vitrina de ideas inconexas?
Al principio quise escribir sobre todo y nada, abrir una ventana virtual a historias que nacían principalmente de un exceso de tiempo libre. Luego, con el mejoramiento del oficio y la irrefrenable autocrítica, esas historias se hicieron esporádicas, quizás por medio a la crítica, quizás para guardarlas para medios más “serios”. Después para rescatar al blog de la inactividad decidí escribir un poco más sobre mis días y viajes, a ver si de esa manera lograba, al menos, la constancia semanal, pero mis días se hicieron aburridos y mis viajes se quedaron en planes. Posteriormente exploré narraciones más personales, pero sin quebrantar una regla autoimpuesta de no ventilar todos los intersticios de mi mente, esto dio como resultado algún post válido e inofensivo. Últimamente me fui por el camino del relato hecho con premeditación para el blog, pero a pesar de tener algunas historias pensadas las palabras simplemente no llegan a tener la mínima consistencia requerida para someterlos a las penurias de la lectura. Ha sido sin duda un camino de ensayo y error, a la evidencia me remito. Hoy siento que hay tanto que decir en este espacio que tiene casi cuatro años y apenas está aprendiendo a hablar. Al parecer este hijo mío tiene problemas de aprendizaje.
Entonces esta noche/mañana le pregunto a unos pixeles, con miras a encaminar a este niño a la iluminación: ¿Qué hago ahora con esto? ¿Declaro que falleció cristianamente o sigo dando tumbos sin pedir permiso ni dar explicaciones?
Al menos de esta sarta de sandeces salió un post gratis, el exorcismo de algunas palabras y el recuerdo de una de mis canciones favoritas.
tl;dr
Don't stop..
si fallece cristianamente voy a Barcelona y te caigo a conazos!!!
La respuesta es sencilla, ejercitar las 3c's, cabeza (pa pensar historias), codos (para apoyarlos en el escritorio hasta que las musas vengan) y culo (para sentarte por horas a escribir…) Así que no hay excusas… ESCRIBE, escribe.E-S-C-R-I-B-E, no importa si después de postear piensas '' que bolas, como postee semejante babosada'', pero escribe coño, que queremos leerte y además, aquí en el blog no toleramos a los que renuncian.Así que anda, coge el tren, sal a la calle…mira a tu alrededor y fabrícate un par de textos nuevos.No seas un gilipollas chaval, que tienes talento y con eso es suficiente.
Don't STOP sunshine… You light up my days and nights with your stories! T amo
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me uno a Isaac.. plus I'm still waiting to find it someday
Me uno a Sonia y a Isaac… Si tu decidieras dejar de escribir muchos nos veriamos afectados… Es cierto que ahora te dedicas a otras cosas, pero aun asi te pedimos todos los que te leemos que no desistas. Tienes un don grandisimo que debes seguir explotando, aqui o donde sea, pero siguelo haciendo… Love you bro!